Patologías tiroideas
El propósito de la glándula tiroides es producir, almacenar y liberar hormonas tiroideas en el torrente sanguíneo. Estas hormonas, también conocidas como T3 y T4 influyen en casi todas las células del cuerpo, y ayudan a controlar sus funciones. Si los niveles de estas hormonas tiroideas en la sangre están bajos, su cuerpo funciona más lentamente. A esta condición se la denomina Hipotiroidismo.
El hipotiroidismo es la patología más frecuente de la glándula tiroidea. Los signos y síntomas más frecuentes de hipotiroidismo incluyen: piel fría, seca, áspera y rugosa, frecuentemente con aparición de un color amarillento debido a la acumulación de carotenos, debilidad, letargo, somnolencia, hinchazón de los párpados, intolerancia al frío, disminución de la memoria, constipación, aumento de peso, caída del cabello, disfonía, nerviosismo, alteraciones en los ciclos menstruales y palpitaciones. Si tiene demasiada hormona tiroidea en la sangre, su cuerpo trabaja más rápidamente. A esta condición se la denomina Hipertiroidismo.
Los signos y síntomas más frecuentes de hipertiroidismo incluyen: nerviosismo, aumento de la sudoración, intolerancia al calor, palpitaciones, cansancio, pérdida de peso, diarrea, temblores, molestias oculares, entre otros.
El cáncer de tiroides es un tumor maligno de crecimiento localizado dentro de la glándula tiroidea. . De estos cánceres, del 65% al 80% son diagnosticados como cáncer de tiroides papilar, del 10% al 15% como folicular, del 5% al 10% como medular, y del 3% al 5% como anaplásico. Las perspectivas del tratamiento son excelentes ya que la mayoría de ellos pueden ser extirpados totalmente mediante cirugía. Se recomienda que quienes han padecido cáncer de tiroides tengan chequeos de rutina por el resto de sus vidas.
El cáncer de tiroides es a menudo descubierto por los mismos pacientes. Puede ver o sentir una protuberancia o nódulo en la parte anterior del cuello, o su médico puede notar un nódulo durante un examen físico de rutina. Afortunadamente, la mayoría de las veces, los nódulos son benignos, lo cual significa que no son de riesgo para la vida. Sólo 1 de cada 20 nódulos resulta ser maligno.
Una vez que el nódulo es descubierto y/o para detectar estas enfermedades precozmente , el especialista requerirá exámenes, que incluirán:
* Análisis de sangre : TSH, T3, T4, T4 libre, anticuerpos anti-tiroideos, anticuerpos anti-peroxidasa tiroidea, tiroglobulina , anticuerpos anti receptor de TSH.
* Exámenes complementarios
Recuerde siempre que un análisis a tiempo puede prevenir la aparición de síntomas y detectar precozmente patologías como el cáncer de tiroides.